DIMENSIONAMIENTO DE
LA INSTALACIÓN FOTOVOLTAICA

A la hora de realizar el dimensionamiento de la instalación son muchos los aspectos a tener en cuenta. Pero antes, debemos entender unos conceptos.

Por un lado tenemos la irradiancia solar. La energía solar llega a modo de irradiancia a la tierra, y se expresa en potencia por unidad de superficie.

La irradiancia de la que disponemos en la tierra es variable, varía entre 1325 W/m² y 1412 W/m². Por lo que se coje un valor promedio, al que denominamos constante solar, E0=1367 W/m². La irradiación es la irradiancia que llega a la tierra durante un lapso de tiempo concreto, y se define en W·h/m².

Esta radiación se diferencia entre radiación directa y radiación difusa. Ésta última es aquella que impacta en el panel fotovoltaico tras anteriormente haberse reflejado sobre otra superficie, nube, …

En regiones como ésta, el norte de España, la radiación difusa supone mas del 50 % de la radiación global, por lo que es importante utilizar la tecnología apropiada para estas condiciones.

Con todo esto, conocer el espectro solar, es decir, la trayectoria exacta del sol y su elevación/altitud sobre el horizonte, nos hará definir de una manera correcta la disposición de los módulos, así como su orientación e inclinación.

Hay que buscar un espacio donde no se generen sombras por elementos cercanos, o donde las sombras sean lo mas reducidas posibles. Los sombreamientos continuos pueden dañar las placas y bajar su eficiencia.

Conociendo el entorno, y seleccionando los materiales que más se adapten a él, dimensionaremos la instalación de tal manera que le podramos sacar el mayor rendimiento.